Hace ya unas semanas que terminé de leer este libro y debería haber preparado la reseña antes, pero como os comentaba el ordenador y yo casi no hemos pasado tiempo juntos, y me ha sido muy difícil hacerlo. Y se me han ido acumulando las reseñas....
Pero hoy le ha llegado el día, y aquí estoy para hablar del libro "Un mal día para morir" de la editorial Literatura Com Libros, y escrito por dos autores Empar Fernández y Pablo Bonell Goytisolo.
SINOPSIS:
Un hombre es arrollado por un tren. Pudiera parecer un accidente, pero hay motivos para sospechar que ha sido empujado a las vías. Estaríamos, pues, ante un caso a investigar… de no ser porque el percance, o el crimen, ha sucedido en la tarde del 19 de noviembre de 1975, víspera del fallecimiento de que, al día siguiente, ocupará todas las portadas y movilizará a todos los agentes disponibles. Fue un mal día, sin duda, para morir; y el suceso quedaría ignorado en medio de las urgencias políticas… hasta que treinta años después, un policía se decide a retomarlo, sacude la capa de polvo que cubre ya los expedientes, y se encuentra con una oscura historia de celos, de venganzas, de traiciones, que pueden afectar, pese a su antigüedad, a muchos de los que en el presente ocupan cargos de confianza.
Una nueva entrega del subinspector Escalona que, como en las anteriores, nos lleva a recorrer una Barcelona actual y cotidiana, perfectamente caracterizada desde las más pobres y tristes casas de vecindad a los despachos de la Generalitat en los que se cuecen los asuntos de gobierno. Un verdadero fresco de la vida pintado con una prosa ágil y a través de unos personajes tratados con humanidad y ternura.
OPINIÓN:
Lo primero que pensé al leer en la sinopsis "Una nueva entrega", es que no podría leer este libro sin haber leído previamente los anteriores. Desde la editorial ya me sacaron de mi error diciéndome que esta es una historia con su principio y su final, con la peculiaridad de que su protagonista, el subinspector Escalona, aparecía en otras obras.Y efectivamente así ha sido. Es más, creo que no me habría dado cuenta de que es una serie de libros, pues en ningún momento hace referencias a momentos pasados, ni ocurridos en otros libros. Es, como me dijeron, un libro con un protagonista común con otros libros.
Dicho esto, comencemos.
Simón Garrido, el inspector que instruyó a Santiago Escalona para moverse en la calle, está hospitalizado. Su situación no es muy buena y él lo sabe. Por eso hace llamar a Escalona a la comisaria dejándole el recado de que vaya a visitarle al hospital. Santiago piensa en su amistad con Garrido, en los tiempos que han trabajado juntos y decide superar sus temores e ir al hospital a visitarle. Una vez allí encuentra que Garrido está muy mal, casi en su lecho de muerte y es por ello por lo que Simón Garrido le pide a Escalona que le haga un favor. Comienza así: "-Verás, lo que te voy a explicar pasó en 1975 [...]"
A duras penas logra Garrido situar al subinspector en la época de 1975 y en cómo funcionaban las cosas por aquel entonces. Pero no le falta el sentido del humor, pues a pesar de su gran dificultad para hablar, le comenta a Escalona: "-Perdona, Santiago. Esto es así. Ya no sé hablar sin efectos especiales - dice con media sonrisa refiriéndose a la tos y al silbido pertinaz".
Entre tos y tos, Simón Garrido le cuenta que un muchacho llamado Alberto Boisgontier fue detenido y brutalmente apaleado, por imprimir y repartir panfletos políticos. Quiso la casualidad que tres días más tarde, el 19 de noviembre, el chico muriera. Aparentemente se había caído al metro debido a un mareo, un vértigo o algo así. "El caso es que ahora, después de tantos años, tengo que saber qué es lo que ocurrió. ¿Por qué íbamos detrás de ese chico? ¿A quién le interesaba darle un buen susto" ¿Cómo coño murió? Quiero que investigues, que preguntes, que hagas lo que puedas, tengo que saber, no puedo marcharme sin..."
A duras penas logra Garrido situar al subinspector en la época de 1975 y en cómo funcionaban las cosas por aquel entonces. Pero no le falta el sentido del humor, pues a pesar de su gran dificultad para hablar, le comenta a Escalona: "-Perdona, Santiago. Esto es así. Ya no sé hablar sin efectos especiales - dice con media sonrisa refiriéndose a la tos y al silbido pertinaz".
Entre tos y tos, Simón Garrido le cuenta que un muchacho llamado Alberto Boisgontier fue detenido y brutalmente apaleado, por imprimir y repartir panfletos políticos. Quiso la casualidad que tres días más tarde, el 19 de noviembre, el chico muriera. Aparentemente se había caído al metro debido a un mareo, un vértigo o algo así. "El caso es que ahora, después de tantos años, tengo que saber qué es lo que ocurrió. ¿Por qué íbamos detrás de ese chico? ¿A quién le interesaba darle un buen susto" ¿Cómo coño murió? Quiero que investigues, que preguntes, que hagas lo que puedas, tengo que saber, no puedo marcharme sin..."
Y quiso también la casualidad que esa misma madrugada en que murió Alberto Boisgontier, muriera Franco.
Y os podréis preguntar, ¿Y por qué es Un mal día para morir? La respuesta viene de mano de uno de los personajes de la obra.
Y os podréis preguntar, ¿Y por qué es Un mal día para morir? La respuesta viene de mano de uno de los personajes de la obra.
"-Esa misma noche, horas después de que Alberto fuera arrollado por un tren en la estación de Gracia, murió Franco. Fue una putada, una gran putada y por partida doble. Me explico, podían haberle desconectado unos días antes o, a las malas, haber hecho que aguantase cuatro o cinco días más, un mes, medio año, qué sé yo. Sí, subinspector, como lo oye. Todo hubiera sido preferible, cualquier cosa menos morirse aquella noche. El hijo de puta nos jodió hasta el final. Nadie se enteró del asesinato de Alberto. Y cuando digo nadie estoy diciendo que muchos de los nuestros lo supieron semanas después. Ni los periodistas que simpatizaban con nuestra causa, nadie cubrió la noticia. Ni un solo periódico le dedicó unas líneas. Todos los diarios hablaban de la muerte de Franco, páginas enteras, declaraciones, pésames, condolencias, ... Todo lo que se le pueda pasar por la cabeza, pero ni una línea de Alberto Boisgontier. Otros que habían caído antes tuvieron un funeral, unas flores, unas palabras llenas de sobreentendidos, una esquela ..."
"Un mal día para morir" está ambientado en la época en la que la policía autonómica y la nacional se unen. Contiene un total de 16 capítulos, que comprenden un período de 16 días que van del 11 de Enero al 26 del mismo mes. Este será el tiempo que nuestro subinspector Santiago Escalona necesitará para esclarecer si Alberto Boisgontier ha muerto o ha sido asesinado. En la historia podremos identificar dos tiempos diferenciados. Por un lado el presente, en el que estamos y en el que se realizará la investigación de manera extra oficial. Y por otro lado, el pasado, que vendrá de la mano de los recuerdos de los personajes que se cruzarán en el camino de nuestro subinspector, y que están relacionados de alguna manera con Alberto Boisgontier. Al movernos en dos tiempos distintos somos capaces de identificar algunas de las diferencias culturales e ideológicas que han ocurrido en España en los últimos 40 años. Y no son pocas. Me quedo con estas dos:
"Eran tiempos de chivatos, de correveidiles, de información bajo mano".
"En el año 75 las parejas no se separaban, el matrimonio era para siempre y si no has tenido suerte y te has equivocado, dos piedras".
Si bien, "Un mal día para morir" es una novela escrita por dos autores: Empar Fernández y Pablo Bonell, no hay ningún momento de la historia que me haga pensar que es así. No hay ningún indicativo de que haya dos personas detrás del libro, ni incoherencias en el texto, ni diferencias obvias en la forma de narrar.
Los personajes son muy variados. Me quedo con Cecilia, la doctora del láser en los ojos, fría y seca. O Paco y Leo, los dueños del bar que frecuenta Escalona, unos tipos soñadores, amables y trabajadores. No puede faltar Helena Moon, una periodista "experta en confidencias, trapicheos y manipulaciones". O Natalia López, la mujer adinerada, bien posicionada, y muy segura de sí misma. Y por último Teresa, la pareja de Escalona, que le apoya desde la sombra, con sus ánimos, su constancia y sus consejos.
Estamos ante una novela que nos cuenta una historia policial, donde se dan encuentro las persecuciones policiales. Una historia donde se efectuarán investigaciones sobre varias muertes, donde encontraremos periodistas ávidos de información, capaces de sonsacar a cualquiera y buscar en casi cualquier sitio y que sacarán de quicio a más de un policía. Nos inmiscuiremos en una investigación extra oficial para averiguar qué pasó con Alberto Boisgontier hace ya muchos años y nos veremos envueltos en casos actuales y su investigación policial del día a día, etc. Pero "Un mal día para morir" también es una historia humana, que nos hace ver la diferencia entre el hoy y el mañana. Un historia que nos describe el paso del tiempo y cómo éste afecta a las relaciones personales. Es en definitiva una historia intrigante, que tendremos que leer hasta el final si queremos saber qué pasó con Alberto Boisgontier.
Los personajes son muy variados. Me quedo con Cecilia, la doctora del láser en los ojos, fría y seca. O Paco y Leo, los dueños del bar que frecuenta Escalona, unos tipos soñadores, amables y trabajadores. No puede faltar Helena Moon, una periodista "experta en confidencias, trapicheos y manipulaciones". O Natalia López, la mujer adinerada, bien posicionada, y muy segura de sí misma. Y por último Teresa, la pareja de Escalona, que le apoya desde la sombra, con sus ánimos, su constancia y sus consejos.
Estamos ante una novela que nos cuenta una historia policial, donde se dan encuentro las persecuciones policiales. Una historia donde se efectuarán investigaciones sobre varias muertes, donde encontraremos periodistas ávidos de información, capaces de sonsacar a cualquiera y buscar en casi cualquier sitio y que sacarán de quicio a más de un policía. Nos inmiscuiremos en una investigación extra oficial para averiguar qué pasó con Alberto Boisgontier hace ya muchos años y nos veremos envueltos en casos actuales y su investigación policial del día a día, etc. Pero "Un mal día para morir" también es una historia humana, que nos hace ver la diferencia entre el hoy y el mañana. Un historia que nos describe el paso del tiempo y cómo éste afecta a las relaciones personales. Es en definitiva una historia intrigante, que tendremos que leer hasta el final si queremos saber qué pasó con Alberto Boisgontier.
Si te interesa comprarlo:
No he podido evitar sonreír (por no decir sonreír abiertamente) cuando dices que "por fin hoy le ha llegado el día"... a un libro que se llama "Un mal día para morir" :)
ResponderEliminarEstá bien saber que para leer el libro no es necesario leer los demás. Es algo que me suele echar un poco para atrás. En este caso parece muy claro, además. Me la voy a apuntar por el tema de la historia humana, más que la policial.
Gracias y un saludo!
Hola guapa!!!!! :D
ResponderEliminarYa estoy de vuelta jejeje ¡Que ganas tenía de pasar a visitaros!
El libro de hoy no me convence mucho por el tema que trata, no es de los que me suelen llamar ^^
Un besote!!!!
Intrigante sin duda, justo hoy andaba pensando en esa casualidad, ser asesinado en un momento de confusión diluye tu muerte, es terrible, vaya, lo pensaba a colación de otro libro.
ResponderEliminarMe llaman la atención las novelas a cuatro manos, esta me la apunto en vista de tu impresión y de que parece que no hay tacha que ponerle.
Besos
Me parece que me puede gustar la trama, según nos cuentas, parece ser que me tocase la fibra sensible este libro.
ResponderEliminarPero hay tanto por leer, jo...
Y leo tan poco...
Saludetess
No conocía este libro. Y viendo lo bien que lo pones, no tengo más remedio que apuntarlo. Además de que me has dejado con la intriga sobre qué paso con Alberto Boisgontier...
ResponderEliminarBesotes!!!
Ana, tú me has hecho reír a mí también. Ni siquiera me había dado cuenta de lo que me comentas "Hoy le ha llegado el día... Un mal día para morir".
ResponderEliminarSi al final acabas leyéndolo, espero que te guste.
Bienvenida Freyja.
ResponderEliminarLa verdad es que las temáticas de los libros que leemos no se parecen mucho. Pero estoy segura de que un día llegará en el que nos piquemos y yo lea algo que te haya encantado a ti, y viceversa.
Madrina, qué casualidad que tú pienses en algo y yo lo esté reseñando. Desde luego, este es el libro adecuado para lo que me comentas. Una muerte en el peor momento. Y escrita por dos personas.
ResponderEliminarDani ánimo, que seguro que algo lees.
ResponderEliminarMargari, ya sabes que para conocer el final, lo mejor es comenzar por el principio. Y en el caso de un libro, lo principal es meterse en la historia y descubrir qué les pasa a los personajes, en este caso a Alberto. Y como de momento no soy una chivatilla, te tocará leerlo ;-)
ResponderEliminarNo conocía esta saga y me alegro que no se desvele información de novelas anteriores. Intrigada me dejas, ¿Me cuentas el final? jaja Bueno, tomo nota del libro.
ResponderEliminarBesitos